CAPÍTULO 73

Capítulo 73 entrevista a la poeta para hablar de su obra y del oficio de escribir en el día a día

Escribir puede ser un trabajo difícil. Es solitario, doloroso, casi siempre mal pagado (si es que pagan) y, por si fuera poco, le hace a uno exigirse más una y otra vez aun cuando el texto ya se ha terminado. Escribir puede ser un trabajo muy difícil… pero, por alguna razón, escribimos. Y menos mal que lo hacemos.

En el caso de Cristina Carrizo Altuzarra (Pamplona, 1981), la necesidad de escribir le vino cuando aún podía contar los años con los dedos de las manos. No sabía por qué, pero lo hacía, y explica en esta entrevista con Capítulo 73 cómo, más adelante, esto y los libros de poesía le sirvió para encontrarse cuando ni siquiera sabía lo que sentía.

Sin embargo, como tantas otras cosas que dejamos en la infancia, la escritura, o mejor dicho, el deseo de ser escritora, acabó perdiéndose. Acabó sus estudios, trabajó de otras cosas… y en el momento menos pensado, cuando decidió publicar algunos de sus pequeños escritos en redes sociales, vio que a la gente le gustaba lo que hacía y el deseo volvió. De nuevo, la escritura había sido algo inconsciente, natural: el resto llegó después.

Desde entonces, Cristina ha publicado ya dos poemarios. En 2020 se estrenó con Imperdible (2020, OLE Libros), un primer trabajo que muy pronta se posicionó como el libro de poesía de autora más vendido en Amazon y, al año, tuvo una segunda edición. Cuatro años después, llegaría Naufragio (OLE Libros), un poemario más ambicioso en lo literario para mostrar «cómo el amor tiene el poder de salvarnos del naufragio y devolvernos la esperanza».

También hablaba de naufragios su admirada Gloria Fuertes, cuando decía: «Nací para poeta o para muerto, escogí lo difícil -supervivo de todos los naufragios-, y sigo con mis versos, vivita y coleando». Tras una vida escribiendo, Cristina, como tantísimas otras personas, no vive de ser poeta. Algo más las une: tampoco podrían vivir sin la poesía. Aunque sea difícil.

La entrevista

Pregunta: ¿Para ti qué es ser poeta?

Respuesta: Para mi es la parte más divertida de la escritura. Es el momento en el que juegas con las palabras y las haces rimar para que tengan un sentido. Para mí es la música de la literatura, que además tiene una parte profunda porque todos los poetas escribimos desde la entraña, desde la herida y desde el dolor, aunque muchas veces también desde la alegría. La poesía me parece jugar, y hubo gente como Gloria Fuertes que lo entendió: la usaba para niños, pero también como un arma de protesta, y luego como un arma de amor.

Pregunta: Todos los escritores empiezan escribiendo porque sí, pero siempre hay un momento en el que uno decide compartirlo con los demás o incluso publicarlo. ¿Cuándo se dio ese momento?

Respuesta: Curiosamente, yo empecé a escribir poesía desde muy pequeña, pero nunca en mi vida se me había ocurrido publicar. Yo no pensaba que fuera merecedora de tal honor, pero vi las redes sociales y empecé a publicar cosas, ideas, pequeños poemas, pensamientos… y de repente vi como una aceptación que ni siquiera me había planteado. Cuando era pequeña sí que estaba en mi imaginario lo de poder publicar un libro, pero es algo que se te pasa y ya está. Así que cuando empezaron varias personas a decirme si no me lo había planteado, en ese momento dije: ¿por qué no? Recopilé todos los poemas que tenía y lo mandé a distintas editoriales… y la verdad es que hubo muchas que me dijeron que querían publicarlo.

Pregunta: ¿Qué te hizo decidirte por una y no por otra?

Respuesta: Publiqué con OLE Libros, la primera que me dijo que sí porque sentí una conexión. Entonces entré en el mundo editorial, que es un mundo que desconocía. El editor me dijo: ‘No te vas a hacer tica, pero te lo vas a pasar muy bien’, y yo encantada. El segundo libro también lo he publicado con ellos, pero ya es otra historia porque sí tiene un sentido y una intención narrativa.

Y por la noche, nosotros.
Quiero abrazarte tan fuerte
que se borren los huecos,
sobrevivir al accidente de nuestros cuerpos
y salvarnos de este incendio.
Quiero matar estas ganas
de lo que no puede ser nuestro.

Cristina Carrizo Altuzarra – Fragmento del poema ‘Borrarte‘

Pregunta: Tenemos entonces un libro hecho por impulsos y otro que llega con la planificación. ¿La poesía surge más de uno de los dos sitios?

Respuesta: Surge de un impulso. Los poemas vienen, ya sea a raíz de una palabra que he escuchado, una historia que me cuentas, una canción que escucho, algo que siento… Luego ese impulso se trabaja, y conscientemente. Por ejemplo, a mí me gusta que tenga rima y que tenga un sentido, es ahí desde donde empiezo a trabajarlo y le doy mil vueltas, lo cambio y lo modifico.

Pregunta: Naufragio es tu segundo libro, y me preguntaba cuál fue el origen del mismo.

Respuesta: Quería contar una historia de amor, y de hecho aún sigo queriendo y por eso estoy escribiendo una novela, porque soy una romántica. El 80% de los poemas que escribo son de amor y desamor, así que decidí hacerlo con el libro y empecé a ver cosas que ya tenía escritas. Entonces me di cuenta de que, al unirlas, tenía esa historia de amor de principio a fin: cuando el enamoramiento, cuando ya empiezas a salir, la ruptura, el duelo de esa ruptura y luego cómo vas recuperándote. A partir de ahí lo dividí en cinco etapas y empecé a trabajar conscientemente en poemas para cada una de ellas. Pero claro, necesitaba ese impulso del que antes hablábamos, y había días que de repente me venían 20.000 ideas y hacías dos o tres poemas, y había días más complicados. Cuando estás en un momento creativo es como que todo está en estado de alarma en tu cuerpo, todo se te activa y estás mucho más receptiva, a todo le das la vuelta… pero hay otras veces que tu cabeza dice ‘hoy no puedo crear, no puedo tener nada’.

Pregunta: ¿En esos casos en los que todo fluye, el poeta puede pasarse de frenada y pecar, digamos, de un exceso de poesía?

Respuesta: Yo creo que sí, y a parte tienes que tener cuidado porque ahí igual empiezas con la verborrea… igual que una persona cualquiera. Hay veces que lo que estás diciendo puede no tener mucho interés, igual cinco poemas se podrían haber hecho en uno con más fuerza. Yo soy una escritora lenta, me reconozco como tal. Soy muy meditativa, pienso, recapacito, lo vuelvo a leer. Y en cambio hay personas que tienen una elocuencia y una capacidad de escritura que a mí me da cierta envidia y a veces hasta me abruma.

Pregunta: ¿También se necesita leer mucho para escribir?

Respuesta: Para escribir poesía no, para escribir narrativa sí. Yo leo poesía porque me gusta y me interesa, pero fíjate que para mis poemas lo que más me inspira de todo es la música. Te diría que no fue así al principio. Entonces sí leía muchísima poesía y descubrir a Salinas o Bécquer me abrió un mundo. Esos poetas me enseñaron que lo que yo sentía se podía expresar así. Fue un cambio de paradigma, porque yo hasta entonces estaba muy perdida, era una adolescente que no entendía lo que me pasaba y gracias a ellos comprendí lo que estaba sintiendo. A día de hoy he empezado a leer a más mujeres. También me gusta, pero no me inspira tanto porque veo la poesía ahora de un modo diferente, me inspira más una letra de una canción, por ejemplo.

Mi corazón me advirtió que esto iba en serio,
con sus desvelos a destiempo,
cantando en bucle esa canción en mi pecho
y latiendo acelerado, arrítmico, contento.

Cristina Carrizo Altuzarra – Fragmento del poema ‘Sacarte de mi cabeza’

Pregunta: Has dicho que estabas escribiendo una novela. ¿Cómo es saltar del poema a la narrativa?

Respuesta: Es una escritura muy diferente. Son géneros que no tienen nada que ver: la narrativa sí que tiene una estructura, una organización, unas dinámicas y una disciplina. Tienes que ser muy tenaz, estar ahí. Yo me he venido abajo muchísimas veces y he empezado cosas nuevas porque me cuesta. Es una parte muy compleja, pero ahora es cuando me he puesto de verdad en serio y ya llevo bastante. Aún así, cuesta una barbaridad: te enamoras y desenamoras de la historia todo el rato.

Pregunta: ¿La novela es romántica?

Respuesta: Tiene parte de historia de amor, pero no es el eje principal. Tiene que tenerlo porque a mí me encanta, pero el eje es la historia de una chica y su paso de la adolescencia a a la edad adulta.

Yo te olvido,
pero los recuerdos son míos
y esos no te los devuelvo.

Cristina Carrizo Altuzarra – Fragmento del poema ‘Olvido’

Pregunta: Es un proceso complejo. ¿Qué nos salva más del mundo, el amor o escribir?

Respuesta: El amor, totalmente.

Pregunta: Por eso escribimos sobre amor.

Respuesta: Por eso escribimos sobre amor (ríe), pero no solo sobre el amor romántico, sobre el amor en general: de familia, de amigos, propio.

Pregunta: ¿Puede salvar leer el poema adecuado en el momento adecuado?

Respuesta: Puede ayudar a que puedas entenderte y ya es un paso hacia el amor propio: el ser capaz de poner en palabras lo que sientes. Yo, de hecho, siempre animo a la gente a que escriba. No se trata de saber escribir, se trata de escribir para soltar, porque a veces lo que tienes en la cabeza rondando lo puedes contar a un amigo, pero yo creo que con el papel frente a frente no hay mentiras. TIenes que ser honesto y soltarlo ahí todo. ¿Que luego lo quieres romper? Pues fenomenal. Eso ya es cosa tuya, pero es importante soltarlo. El papel lo soporta todo. Tu cuerpo no.

Pregunta: Esto me recuerda algo que has dicho antes, en relación a una época en la que decías que no te merecías publicar. ¿Qué piensas ahora?

Respuesta: Creo que tienes que tener una cierta calidad literaria, para mí eso es importante y creo que tiene que tener unos filtros, aunque el filtro de una editorial no tiene por qué siempre ser el correcto. Prueba de ello son todos esos autores que han sido rechazados y luego han escrito auténticas obras de arte. Pero bueno, tiene que estar bien escrito porque al final estás transmitiendo cultura a otros. Ahora bien, en cuanto a la temática o la forma… ahí ya lo que a ti te gusta igual a mí no me gusta y viceversa, entonces es difícil poner lo que está bien y lo que está mal. El contenido es muy subjetivo, y la poesía es un arte.

Pregunta: ¿Te imaginas un mundo sin poesía?

Respuesta: No, porque además es una de las primeras formas de comunicación. Fíjate en la rima, en como los juglares cantaban y rimaban todo de manera constante. Es un juego que yo creo que, si no existiera, se habría acabado inventando.